Mayor financiación, solvencia, mejora en la gestión del conocimiento, medidas de contención a largo plazo y a corto que no afecten directamente a la prestación, son algunas de las ideas que han surgido en las primeras ponencias de la jornada de Financiación Sanitaria en España organizada por Fundación Bamberg, gracias a la colaboración de Lilly.
En la mesa inaugural, Ignacio Para, Presidente de la Fundación Bamberg, destacó la importancia de estas jornadas para «generar debate y contribuir a la toma de decisiones a aquellos que tiene responsabilidades sobre los temas objeto de esta conferencia». Así mismo, introdujo el debate lanzando las cuestiones que se trataron a lo largo de toda la jornada de estudio, y entre las que destacan la capacidad de España como país para financiar el Sistema Nacional de Salud y las expectativas de crecimiento en los próximos años o la necesidad de configurar un Sistema Nacional de Salud más eficiente que suponga ahorros sustanciales. Eric Patrouillard, Presidente de Lilly, defendió una mayor inversión para solucionar las necesidades de financiación del sistema sanitario español que considera «eficaz, pero que necesita cuidados para no perder su esencia».
En su intervención invitó a todos los actores implicados al diálogo sobre posibles soluciones a las necesidades de financiación del sistema sanitario español que según su opinión pasarían por mejorar la cohesión, reducir la burocracia, mejorar la coordinación y seguridad jurídica y, especialmente, «por la creación de un sistema basado no sólo en el coste sino en la eficiencia y en el resultado de las soluciones utilizadas para mejorar la calidad de vida, reducir el impacto de las enfermedades y mejorar la productividad de la sociedad».
Paola Bovolenta, coordinadora del área de biología y biomedicina del CSIC, destacó el interés, también para los investigadores, «de contar con espacios de debate como el organizado por la Fundación Bamberg, donde se analizan las posibilidades de aumentar la financiación del Sistema Nacional de Salud, especialmente por el envejecimiento de la población, que conlleva más enfermedades crónicas y neurodegenerativas» Tras la inauguración, Luis Ángel Oteo Ochoa, jefe del departamento de desarrollo directivo y GSS de la Escuela Nacional de Sanidad, Instituto Carlos III, que intervino a través de video, considera que el sistema nacional esta infrafinanciado y que necesita más fortaleza, «una fortaleza económica, pero también de la sociedad civil para que nos ayude a modular la baja racionalidad que caracteriza nuestro sistema nacional de salud».
La conferencia magistral corrió a cargo de Juan Velarde Fuertes, economista y consejero del Tribunal de Cuentas, quién repasó los problemas y desafíos a los que se han tenido que enfrentar los sistemas de salud a lo largo desde el siglo XIX, hasta llegar a la situación actual en la que el Sistema Sanitario se enfrenta a problemas como el envejecimiento de la población, la inmigración, el turismo sanitario, el déficit del sector público, y fundamentalmente, el exceso de gasto generado por la transferencia de la sanidad a las comunidades autónomas. Para Velarde, el problema sanitario exige un cambio radical, y este cambio «pasa por la re-centralización de la sanidad del Estado. Hay que cambiar el sistema de arriba abajo».
«Las autonomías deben seguir, pero no en el mundo sanitario», concluyó. Julián Garcia Vargas, economista y ex ministro de Sanidad ha sido el encargado de abrir la mesa de debate Renta Nacional, Financiación y Presupuestos Públicos, y lo ha hecho destacando que el principal problema de la sanidad es que, en una situación de crisis como la actual, donde el dinero se destina principalmente a prestaciones de desempleo, no es una prioridad, y además tiene poco margen para reducir gastos, ya que no se puede controlar la demanda. El catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Pompeu Fabra, Guillem Lopez-Casasnova, ha querido hablar de solvencia en lugar de sostenibilidad de la sanidad, ya que «la sostenibilidad depende de decisiones políticas y la solvencia, que depende de de la financiación pública, es la capacidad para dar respuesta a las situaciones que surjan». Además, expresó la necesidad de racionalizar «el gasto, el grado de universalismo de la cobertura o el catálogo de los servicios para poder ser solventes».
José Luis Lancho de León, economista del Estado, destacó la necesidad de mejorar la gestión de los recursos sanitarios y del control del gasto sanitario. «Es posible mejorar la gestión sin necesidad de reducir el nivel de gasto en la medida que parecía necesario en un principio» Francisco Cabrillo, Catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid y Presidente del Consejo Económico y Social de la Comunidad de Madrid, cerró la mesa de debate mostrándose escéptico sobre la posibilidad de cambio en el funcionamiento del sistema sanitario, a no se que se diseñen nuevos incentivos para los que tienen que realzar el gasto y se cambien las restricciones adecuadas. «Los políticos están esperando a volver a una situación similar a la que vivíamos para volver a hacer lo mismo».
En la mesa «Eficiencia de gestión y financiación alternativa», Javier Urzay, subdirector general de Farmaindustria, destacó la necesidad de que la sanidad luche por un puesto prioritario en el debate presupuestario. «Hay que transformar el sistema de salud para ser solventes a largo plazo y también tomar medidas cortoplacistas, siempre y cuando no sean de choque ni afecten directamente a la prestación y al progreso científico», concluyó Urzay. Mariano Sánchez Bayle, Presidente de la International Association of Health, se mostró positivo en cuanto a la existencia de alternativas que aseguren la sostenibilidad del sistema de financiación, siempre y cuando se centren en los que considera los focos de ineficiencia del sistema, entre los que destacan la subfinanciación del sistema sanitario, la política farmacéutica, la sobreutilización de la tecnología, o la gestión politizada, entre otros. El Presidente de la organización Española de Hospitales y Servicios de Salud, José Soto Bonel, analizó la posibilidad de mejorar la sostenibilidad de la gestión hospitalaria, repasando las variables que es necesario tener en cuenta para conseguirlo, como son el alcance, la organización, el tamaño y la localización, entre otras.
El encargado de cerrar esta mesa y la primera parte de esta jornada de estudio fue el profesor Juan José López-Ibor, quien manifestó que los retos a los que se enfrenta nuestro sistema de sanidad son cuatro: la gestión del conocimiento por procesos, de forma multiprofesional incluyendo la docencia y la innovación; la gestión sanitaria como problema ético y no sólo económico; el alto coste en dinero y en carga social de las enfermedades y la transformación de un conjunto de dispositivos asistenciales en un Instituto.